Meses de manifestaciones pacíficas contra el giro represor del Gobierno georgiano han derivado en una ola de enfrentamientos con la policía en las calles de las principales ciudades del país. La nación del Cáucaso encadena cuatro jornadas consecutivas de protestas después de que el Gobierno anunciase la suspensión de su adhesión a la Unión Europea. Los choques de este domingo culminaron con al menos 44 personas atendidas en un hospital, según el Ministerio del Interior. La policía ha empleado indiscriminadamente gases lacrimógenos y cañones de agua contra los manifestantes, que a su vez emplearon bengalas y artefactos incendiarios, según las imágenes difundidas por los medios oficiales. Al menos 224 personas han sido arrestadas estos días, incluidos periodistas y un líder opositor que fue liberado al cabo de unas horas.