El prorruso Mikheil Kavelashvili ha sido elegido este sábado presidente de Georgia en una votación celebrada en el Parlamento que fue boicoteada por la oposición. Kavelashvili, que recibió el apoyo de 224 de los 300 diputados nacionales y municipales convocados, sustituye en el cargo a la opositora europeista Salomé Zurabishvili, que se niega a abandonar su puesto, ya que no reconoce la legitimidad del legislativo que salió de las elecciones parlamentarias celebradas en octubre. El ya presidente, que era el único candidato en discordia, se convierte así en el sexto en ocupar en la historia del país caucásico desde su independencia de la Unión Soviética, en 1991.