Ucrania desafía la versión oficial sobre las causas del accidente del vuelo J2-8243 de Azerbaiyan Airlines este miércoles en Kazajistán y asegura que fue derribado por las defensas antiaéreas rusas. La hipótesis que está cobrando más fuerza es que un misil ruso impactó contra el avión cuando Moscú trataba de repeler un ataque de drones ucranios sobre Grozni, la capital de la república rusa de Chechenia. Hasta cuatro fuentes consultadas por Reuters que conocen los detalles de la investigación avalan esta teoría.