La cuenta atrás para las deportaciones de inmigrantes de la era Trump está en marcha. El presidente contará con una nueva herramienta legal para detener y empezar a expulsar a inmigrantes del país. El Congreso se dispone a aprobar una ley que permita las deportaciones de inmigrantes sin papeles que hayan cometido delitos menores, aunque no hayan sido condenados. La Cámara de Representantes aprobó la norma la semana pasada y el Senado dio después luz verde a su tramitación gracias a una votación en que fue decisivo el apoyo de los senadores demócratas. El calendario no está cerrado, pero el debate y aprobación final de la ley podrían producirse incluso esta misma semana, a tiempo para que Donald Trump la aplique tras tomar posesión el próximo 20 de enero.